Natasha es una de las novias con las que he conectado increíblemente. Es publicista (carrera que yo comencé pero no terminé :P), le gusta cocinar (y comer bueno), y en sus primeros emails, antes de tantear estilos y cotizaciones, comenzó por detallarme muy específicamente lo que NO quería. Eso me encantó. Me encontré con una mujer con el mismo grado de quisquillosidad que yo, ❤ y 70 mil horas más tarde, de conversaciones que terminaban en recetas y restaurantes, llegamos a un diseño que funcionó.
Como las invitaciones que más disfruto, por su personalidad y la naturaleza de su boda (que sería al aire libre en un jardín <3) esta chica estaba dispuesta a “salirse de la caja”. Su boda sería en Camp David Ranch, un hermosisisisisimo venue en Santiago de los Caballeros, frente a un backdrop de pinos espectacular, con detalles super calculados y representativos de esta pareja.
Su invitación pasó por varias etapas, y una vez seleccionamos cartulina y sobre, probamos el diseño en diferentes métodos de impresión* sobre el mismo material. (Pueden ver al final del post, en el Behind the Scenes, fotos de algunas de las combinaciones que tratamos).
Concluimos con su selección de relieve en los nombres, en un tono de verde un poco más oscuro que el de la cartulina de la tarjeta, junto con stamping color cobre en el resto del texto.
Con el cobre, buscábamos imitar el tono de dorado del lacrado que usaríamos para cerrar el sobre. Y es que la impresión en el verdadero dorado del foil, cuando se hacía sobre el verde de base, se veía demasiado amarillento. Usar el metálico en color cobre compensaba el contraste con el fondo y de lejos combinaba mucho mejor con el sello de cera.
La tarjeta principal fue acompañada de una pequeña de RSVP y otras informaciones. Esta se imprimió en relieve termográfico en varios tonos del verde del sobre en cartulina blanco hueso con mucha textura.
Los sobres, de solapa recta, eran de un papel vegetal de alto calibre, y el pendolismo lo hice en tinta marrón de nogal (Walnut ink) a tres líneas en una cursiva libre como la de los nombres de la tarjeta de invitación.
Tengo que decir, que las fotos de la boda de Natasha y Rimsky están espectaculares. No solo por la sensibilidad del fotógrafo (un saludo a Ricardo Enrique, tienes una nueva fan), sino porque deja ver como el ojo de esta novia se encargó de que TODO tuviera sentido a la hora de “curar” los elementos de su boda.

Detalle de los menús de bebidas que se colocaron en las mesas y el menú de la comida montado en acrílico, ambos con las hojitas verdes de la invitación, en versión acuarelas.
Desde la selección de las sillas, las lámparas (with the infamous lamp situation 😉 ), el matching del tono de verde de la cartulina con el verde de su locación y decoración, hasta el detalle de la textura de su vestido y la selección del vidrio que estaría presente en su boda… todo fue “fríamente calculado”. Todas las bodas son bellas, pero este grado de detalle no siempre lo logra un wedding planner solo… este es el mejor ejemplo de branding de bodas, y me enorgullece decir, que por una publicista. Mi trabajo fue una pieza más en su rompecabezas, y verlo junto a las fotos de como quedó todo, me hizo sentir parte de un verdadero PLAN.
Gracias Natasha por cederme esta tarea que YO SE que considerabas tan importante. ¡Salud por ese ojo clínico señorita! (suena más lindo que señora 😛 ), me encantó trabajar contigo. ❤
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Fotos de los novios: Ricardo Enrique
Wedding Planner: Natacha Rosario Eventos
Diseño piezas e invitaciones de boda: WiriWoods
Vestido espectacular de novia: Ana entre Costuras
Locación
Camp David Ranch
BEHIND THE SCENES

Los novios visitando mi oficina ❤ con su cake topper antes de montar. A la derecha, el detalle de la corbata del novio, foto que recibí para pintarle la del muñequito.

Las diferentes combinaciones que probamos. Embosado con stamping, stamping completo, combinaciones de diferentes colores de stamping, entre otros. Fotos de Alejandra González
Wow!! La mejor reseña para lo que fue esa boda. Las que vivimos el proceso junto a Nat sabemos que tanto ella se empeño en cada uno de los detalles.
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