Este verano, algunos de mis diseños de invitaciones de bodas fueron publicados en la revista “Bodas a la Moda” de la Editora Listín Diario, que circula en República Dominicana. Comenzó como un proyecto de colaboración, donde diseñaría solo el lettering de un artículo sobre el tema, y terminé compartiendo con ellos mi experiencia en el proceso de diseño en los últimos años. Gracias a su editora Diana Suriel, y a Helen Borda por la oportunidad.
Aquí les comparto la portada de esta edición de la publicación, así como el contenido del artículo, que incluyó fotos de algunas de las bodas que he trabajado.

“El arte de la invitación perfecta”
Uno de los aspectos que más importancia acoge cuando se trata de un enlace nupcial, es el que se refiere a las invitaciones. Digamos que la invitación es la carta de presentación de lo que será el concepto, tono e inspiración de tu boda. ¿Qué tan formal es? ¿Cuál es la vibra que buscan transmitir? ¿Qué tanto se refleja en ellas de los novios? Son preguntas que tienen respuesta a través de las invitaciones y de toda la papelería del evento, cuyo conjunto es conocido como suite.
Carolina Hernández Tejeda es experta en el tema, desde 2014 lleva su compañía WiriWoods, especializada en el diseño de invitaciones y suites para bodas. Para ella algo tan sencillo como conversar con los novios y conocer la historia de como se conocieron, es vital para comenzar con el proceso de diseñar las invitaciones.
PARA TOMAR EN CUENTA
“La historia en común de los novios es muy importante”. Comenta Carolina: “En su trayectoria encuentras detalles que se pueden convertir en parte, sin ser literal, del diseño de su suite. Esa es la primera pieza que recibirán los invitados, y aparte de dar un preview de lo que será la boda, debe se muy especial para los novios y representarlos, casi con secretitos que solo ellos y quienes los rodean puedan identificar como parte de su historia… todo dependerá de la pareja”.
Otro aspecto clave, agrega Carolina, es dejarse llevar del diseñador a cargo de este trabajo, ya que es posible proyectar en la invitación el mood del evento sin ser completamente literales, sustituyendo imágenes por una correcta selección de tipografía, colores, texturas, etcétera.
TODO ESTÁ EN LOS DETALLES
La historia de los novios debe guardar coherencia con el día de la celebración. La fecha de la boda, la etiqueta, cantidad de invitados, tipo de ceremonia, lugar y piezas claves de la decoración darán el punto de partida para el diseño. “No es lo mismo una boda civil en la playa de etiqueta tropical, que una en la Regina Angelorum con recepción en Country Club. A veces las parejas tienen muchas ideas mecladas (por influencia de otras bodas, fotos que encontraron en Instagram o Pinterest), pero que al aterrizarlas no tienen nada que ver con su propio evento. Es por eso, que incluso recomiendo, haya comunicación entre quien diseña la invitación y los wedding planners“, sostiene la experta al conversar con esta publicación.
TENDENCIAS DEL MOMENTO
Aunque nunca se fueron, los estilos super clásicos y tradicionales vuelven a ser una de las principales opciones para muchas novias. Carolina también agrega que se mantienen los temas floreados, aunque más dosificados, estos tienen menos presencia en la tarjeta principal y más en las piezas que la acompañan en la suite (sobresm tarjetas pequeñas, etc.) “El año pasado tuvimos el boom de las flores y hojas tropicales con brush lettering en los nombres, pero ya eso de hacer invitaciones temáticas muy coloridas, con brillo, broches y lazos está “mandado a recoger”, para dar entrada a tonos más neutrales, simplicidad y texturas orgánicas.”
LAS MÁS EN BOGA
En palabras de Carolina, las conocidas como “Bodas de Destino” o que tienen muchos invitados internacionales, se prestan para agregar detalles al fin de semana de la boda, que normalmente incluye otros eventos y días libres para pasear en la ciudad que se visita.
En cuanto a los colores cita que se mantiene el azul oscuro, aunque ahora menos Navy y más hacia el Prussian y Oxford Blue. Los rosados hacen un comeback en tonos rosa viejo y rosa palo, ambos apastelados. También el color vino, grises oscuros y negro, (que puede dar resultados muy elegantes).